Con la llegada de agosto y la proximidad de la primavera, técnicos y productores comienzan a implementar medidas clave para optimizar la producción en los sistemas lecheros y atender de forma eficiente el inicio de las pariciones en la ganadería de carne.
En el sector lechero, la atención está centrada en preparar los rodeos para el pico de producción de primavera, asegurando una buena condición corporal de las vacas preparto, ajustando la alimentación estratégica y controlando aspectos sanitarios para prevenir problemas metabólicos y facilitar una buena lactancia.
Especialistas advierten que la planificación forrajera es determinante en esta etapa, aprovechando el crecimiento de las pasturas para disminuir el uso de concentrados sin comprometer la producción. También se destacan medidas como el monitoreo de mastitis, la revisión de equipos de ordeñe y la asignación de potreros para vacas recién paridas.
En la ganadería de carne, en tanto, comienza la etapa clave de pariciones, especialmente en rodeos de cría, lo que requiere una mayor vigilancia de los lotes preñados, disponibilidad de sombra y agua de calidad, y cuidados especiales para los terneros recién nacidos. La suplementación proteica y mineral para las vacas también se vuelve fundamental para asegurar una buena lactancia y preñez futura.