Convencidos de la presión en agosto de los compromisos de pago de insumos del rubro y la salida de los últimos barcos en exportaciones de soja.
La coyuntura se define por el cuello de botella que impone esta oferta, que debilita los precios de la oleaginosa.
El director de Fimix, Federico Morixe, sostuvo que, sin embargo es preciso aguarda que se descomprima este escenario para aguardar un incremento de las cotizaciones.
Con prudencia, la oportunidad que surja en cuanto a valores en el mercado exterior, tiene que ser capturada por los agricultores, apuntó.
